sábado, 7 de febrero de 2015

HACIENDA SOMOS TODOS

"Hacienda somos todos", eso decía el anuncio y no se por que me viene a la ente eso de "El estado soy yo". Quizás sea por la reiterada manía de los políticos de considerar cualquier crítica o investigación sobre su pasado o presente como un ataque al corazón mismo de la democracia, así cuando a Pujol se le investiga su patrimonio se ataca a la esencia misma de Cataluña, cuando se imputó a sindicalistas en Andalucía por los ERE se atacaba la libertad sindical, cuando se investiga la trama Gürtel se socava al gobierno y curiosamente cuando se investiga a Monedero y Cía se ataca al movimiento anti casta. Se han confundido los términos esta claro y al final como dice el refrán castellano a cada cerdo le llega su San Martín.
Creo que todos tenemos claro hoy día que la idea de la izquierda es fundamentalmente subir impuestos a quienes mas ingresan y reforzar la labor inspectora para luchar otra el fraude. Creo que tambien estaremos de acuerdo en que hemos de dar ejemplo y así los titulares de las Black han ido siendo expulsados de sus respectivos partidos o grupos aunque habrá que señalar que esto ya se sabia hace tiempo y nada se hizo, pero creo que ha sido un pequeño paso en la dirección correcta; sin embargo casos como el sindicalista de Asturias que ni comparece ni explica, o como el de Monedero, escondiéndose para no ser notificado como los mejores y más ilustres chorizos de la historia no es nada edificante.
Acertada ha estado la vicepresidenta al señalar que con esas actitudes, si se extienden, ¿como van a pagarse las medidas sociales que preconizan?, quizás, y es solo una idea, pidiéndoselo a la Alianza Bolivariana a cambio de ir todos con chandal patriótico y pajaritos en el hombro.
Es vergonzoso que quien se erige como adalid de lucha contra los privilegios de una casta use sus métodos para beneficiarse el y los suyos, por que de los suyos son los que recibieron el dinero ¿sin preguntar?, y se lo quedaron para medrar ya que se sus trabajos sesudos y llenos de promesas no se vive, mas bien se muere, y si no que se lo pregunten al común del pueblo venezolano.
No tengo nada contra quien lucha contra el opresor, que no por ser poderoso o rico lo es, pero con dignidad, mucha dignidad y os pongo un ejemplo, Julio Anguita, Iñaki Azkuna, Fraga, y tantos otros que han sido fieles a sus ideales y a sus electores sin llevarse nada y sin dejar de ser seres humanos.
Creo que deberíamos fijarnos mas en la gente que en las frases hechas y los eslóganes al uso que es de lo que están hechos los discursos de los políticos, de la casta o no, que tenemos a la vista. Dios nos pille confesados.