viernes, 5 de agosto de 2011

INDIGNADOS

Indigna ver como algunos políticos y medios de comunicación rien las gracias al grupo de presuntos indignados que ahora pretenden campar por sus respetos en Madrid y otras ciudades; quieren acampar donde les de la gana sin importar mas.
A quienes representan estos sujetos sigue siendo una incógnita, ya que nada les une en lo ideológico, económico o social, no tienen criterio, y si no que se lo digan al propietario, divorciado, parado y recogido en casa de un amigo que trataba de desahuciar a su inquilina, tras varios meses de impago, y cuyo desahucio fue impedido al grito de abajo la banca, maldita la gracia no?
Como ya dijo un tertuliano en un debate de Cuatro, no se ha visto pancarta alguna en demanda de trabajo u ofreciendose para trabajar, tan solo absurdeces como "descargas gratis ya", "no al ejército", "drogas legales", etc..., es decir soluciones para la situación.
El ejercicio de expresar la indignación debe encauzarse por las vías legitimas no por las que sirven a las injusticias, y para ello hubo una oportunidad en mayo que a la vista está, o no fue aprovechada por que estaban ocupados pensando o por que realmente su peso social no es lo que parece.
Muchos, muchisimos de nosotros, estamos indignados, hemos estudiado y trabajado duro para tener una profesión o trabajo digno, desde el que ejercer legitimamente nuestros derechos, eso si, sin cerrar tiendas, obstaculizar calles, acampar en plazas, etc...; la igualdad de oportunidades que se nos dió a partir de la democracia había que aprovecharla, y siendo cierto que muchos de los "indignados oficiales" han perdido sus trabajos o formados no lo encuentran, no es menos cierto que gran parte de quienes hoy protestan se autoexcluyeron del sistema perdiendo oportunidades que hoy, curiosamente, reclaman; además de ellos, no lo olvidemos, muchos mas están igual o peor y luchan desde la normalidad contra ello, con resultado dispar. ¿Que culpa tiene el comerciante de Sol, el taxista o el empleado de sus problemas?, tengan por cierto que al banquero al que odian, que tampoco hay tantos, al político, al que luego van y votan, no se ven afectados por sus actividades, ellos no viajan en metro, en taxi o autobús.
En fin creo que hace falta reflexión, cierta dosis de indignación como dijo el profesor Marina hace pocos días, y sobre todo cordura y consideración hacia los demás.
Un abrazo a todos y suerte.


-- Desde Mi iPad

Ubicación:Av Martín Alonso Pinzón,Huelva,España

1 comentario:

  1. La suerte es seguro que la necesitaremos, que la tengamos es otra cosa. Vaya momento nos ha tocado vivir.

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