Parece que de las opciones que ayer se dejaban entrever Camps ha optado por la que paradójicamente le pedía el PSPV, la mas denostada por el PP, pero que puede llegar a ser la jugada del siglo. Si al final del proceso, que ya estaba abierto antes de las elecciones y a pesar del cual tiene mayoría absoluta, resulta absuelto bien en primera instancia bien tras recurso, vuelve reforzado y ademas los acusadores particulares humillados. Si por el contrario le condenan, ya no condenan al político en activo ni al presidente, y ademas no apareja la inhabilitación, es decir no matamos al enemigo y le dejamos malherido pero con fuerza para revolverse, la mayoría absoluta. La presencia del presidente en el banquillo seria demoledora en cuanto a imagen y desgaste, ofreciendo a la oposición un blanco fácil al tiempo que se ataría a la presidencia sin libertad para desarrollar su función política.
En fin, que creo que ha sido la mejor opción que le quedaba ya, de las que tuvo en su día. Ahora como ocurrió con Zaplana es posible que venga alguien que aumente la mayoría gestionando el proceso, en fin cosas veredes.
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