viernes, 23 de agosto de 2013

VUELTA AL COLE

Han pasado ya cuatro días de mi vuelta al trabajo y he preferido esperar un poco para escribir algo para evitar los efectos de lapost vacación.
Han pasado varias cosas, pero creo que lo peor de todo es el gran culebrón del verano, y del año, la  corrupción. Se ha desmandado, ya no solo se trata de concejales de urbanismo o alcaldes de medio pelo, se trata de organizaciones enteras, partidos políticos, sindicatos, comunidades autónomas, etc...
el descaro es ya mayúsculo, solo comparable al de Roldan, que junto a estos era un pobrecito, no se limitan a unas perras por dietas, como hacen los diputados andaluces que cobran en Agosto dietas de desplazamiento, se trata ya de apoderarse directamente del dinero destinado a ayudas y cursos, a veces  procedente de la UE con lo que ello significa en posteriores ayudas. Se trata de recibir dinero destinado a ayudas a los afectados por EREs para entregarlo a amigos y financiar el partido, que a la postre nos da de comer, no es así?
Se trata de poner la zorra a guardar las gallinas, como Barcenas en el PP, que para asegurarse pocas o ninguna pregunta facilitaba sobre-sueldos a algunos listos, y ya sabemos que cuanto mas se tiene mas se quiere y aparecen en bigotes y compañía y se descontrolan.
La avaricia rompe el saco, que verdad!!!!.
Mientras tanto pan y circo, el fútbol no paga un duro de SS en años, los impuestos de sociedades a niveles mínimos y procuran hacer lo que sea para no liquidar IRPF de los futbolistas, pero eso si son de interés nacional.
En la otra cara de la moneda estamos los que si nos olvidamos de declarar el llavero que nos regalaron en el banco nos retiene la devolución o nos hacen la paralela, los que tenemos que sufrir la ineptitud de la administración cuando nos paga a cargo del año anterior cantidades que nos debería haber pagado en su día y nos obligan a hacer complementarias por que si no nos meten la multa   oportuna, los que si dejamos de pagar un mes la SS de un empleado nos mandan la inspección oportuna, los que en suma nos vemos atrapados y absolutamente indefensos. Solo nos queda el derecho al pataleo; aun así creo que no debemos de dejar de lado el dato de que sin nosotros no son  nada, sin votos no funcionan, sin gente que les ría las gracias no son nada, sin acción no hay reacción. Protestar en la calle ya no sirve para nada, debemos organizarnos como ciudadanos que somos y cada uno desde nuestro puesto orientar nuestro trabajo ha eliminar estas situaciones, reclamar cada vez que ocurra algo o sepamos algo como lo que vemos diariamente en prensa, exigir de las organizaciones que sirven a la sociedad que realmente lo hagan, a los sindicatos las cuentas claras, a los partidos que de verdad representen al pueblo que les vota y se dejen de frasecitas y estereotipos, que cobren por lo que hacen de verdad y nunca mas de lo que harían en la calle con su trabajo, y las dietas después de pagar ellos los gastos, como todo el mundo.
En fin por hoy creo que ya he cumplido con la terapia, hasta otra.

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